Veracruz, Ver.- El Instituto Nacional Electoral (INE) ha emitido una grave resolución tras detectar un desfalco millonario en las arcas del extinto Partido Fuerza por México en Veracruz, señalando como responsable a su dirigente estatal en 2024, Eduardo “Tato” Vega Yunes. De acuerdo con la investigación, Vega Yunes no pudo comprobar gastos por $4,765,000.00, lo que constituye una grave omisión en el manejo de los recursos públicos destinados a la operación del partido.
Un partido en caída y un dirigente sin cuentas claras
Fuerza por México perdió su registro nacional en 2021 por no alcanzar el mínimo de votos requerido, pero logró mantener su estatus como partido local en diez estados, incluido Veracruz. Sin embargo, en la elección de 2024, tras su alianza con Morena, el Partido Verde y el PT, volvió a perder el registro estatal debido a la escasa respuesta de los votantes.
Durante la contienda por la gubernatura en Veracruz, Vega Yunes fue criticado por su falta de apoyo a los candidatos del partido y su postura de “galán de telenovela”, ya que en lugar de fortalecer su estructura, buscó acercarse a la entonces candidata Rocío Nahle. Aunque intentó posicionarse como un activo valioso dentro del gobierno, terminó relegado a un cargo sin trascendencia en la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario (SEDECOP).
Las irregularidades detectadas por el INE
Según la resolución INE/CG87/2025, el partido incumplió con la rendición de cuentas en diversos rubros, incluyendo:
- Omisión en la presentación de estados financieros clave del ejercicio 2023.
- Falta de documentación para justificar cuentas por pagar y cobrar con más de un año de antigüedad.
- No acreditar la identidad del auditor externo.
- Irregularidades en los informes de nómina y pagos a dirigentes.
- Omisión en el registro de financiamiento público por $96,692.00.
- No presentar contratos ni reportes de actividades por gastos en asesorías.
Vega Yunes en la mira: del desfalco a los moches
Los militantes y exsimpatizantes de Fuerza por México han expresado su indignación, exigiendo transparencia en el manejo de los recursos públicos. Mientras tanto, Vega Yunes enfrenta crecientes señalamientos dentro de la SEDECOP, donde empresarios lo acusan de solicitar “moches” para facilitar inversiones en Veracruz.
La sombra del desfalco pone en aprietos a la administración de Rocío Nahle, pues si su colaborador no rindió cuentas ante el órgano electoral, ¿qué garantías hay de que lo haga en la gestión de recursos del estado?
El caso sigue en investigación, pero deja en evidencia la falta de control en el financiamiento de partidos políticos y la impunidad con la que algunos dirigentes manejan los recursos públicos.